Bioenergia

¿Qué energía usa el sanador? ¡Wow! ¿Se puede usar energía del universo para sanar?, ¿Qué energía usa el sanador?, ¿de dónde toma esta energía?, ¿Qué hace con esta energía? bueno allí les va algunas respuestas de lo que hago para sanar: La ciencia nos ha explicado que existen muchas fuentes de energía que usa el organismo humano para su desarrollo… No mencionaré las que usa el ser humano para muchas de sus actividades y que todos conocemos, como pueden ser la eólica, eléctrica, hidráulica, geotérmica, biomasa, nuclear, etc. Solo nos concentraremos sobre lo que usa el cuerpo humano, la que utiliza y sintetiza de forma directa nuestro organismo (y de hecho todos los organismos vivos en una u otra forma). Solo para mencionar algunas de las principales: Los alimentos: El más conocido de los componentes que nuestro organismo metaboliza para su existencia  El agua: Sabemos todos lo indispensable que es este vital líquido para nuestra salud, siendo unos de los componentes más grandes de nuestro organismo,de nuestros sistemas sanguíneo y linfático. Así mismo aporta muchos minerales.  La luz: Muchos seres vivos utilizan el proceso de fotosíntesis para metabolizar energía; si bien las plantas y flores lo usan más que nosotros, lo que contiene esta luz es indispensable a los seres humanos  El aire: El Oxígeno es esencial (la carencia de unos minutos de este, es suficiente para privarnos de la vida), es un agente purificador, oxida las toxinas y desechos orgánicos, también produce energía, Adenosín Trifosfato (ATP) que es indispensable para nuestras células. Pero, regresando a la pregunta inicial ¿QUE ENERGIA USA UN SANADOR? La energía que se usa es la bioenergía o la energía de la vida Más información en mi artículo:   ¿qué es la bioenergía?   Existen muchas escuelas que utilizan la energía vital para sanar (Reiki, Qi-gong, Quantum Touch, Pranic Healing, Radiestesia, para solo mencionar algunas) y cada una suele tener su propio manejo, técnicas y protocolos. ¿DE DONDE SE TOMA ESTA ENERGÍA? Estas 4 fuentes de bioenergía son: La bioenergía de la tierra: El planeta tierra es como un enorme imán que emite campos magnéticos que interactúan con el cuerpo humano provocando diversos efectos; también emite y transforma ciertas radiaciones que provienen del sol  La bioenergía del sol: El Sol emite energía en forma de radiaciónelectromagnética; es el principal productor de energía para nuestro entorno en la tierra.También emite distintos tipos de radiaciones con muy diversas tipos de frecuencia como las radiaciones ultravioleta, infrarojo y toda la gama de color que conocemos, incluyendo algunos que no son visibles al ojo humano como los fotones  La bioenergía del aire: El aire es, como sabemos, uno de los elementos más vital para nuestra existencia, contiene energía de todo tipo, siendo sus componentes los siguientes: oxígeno, nitrógeno, dióxido de carbono, argón, neón, helio, criptón, xenón, hidrógeno, metano, óxido nitroso, ozono, partículas y vapor de agua  La bioenergía espiritual: La bioenergía espiritual se concibe como una fuerza universal de la vida corriendo en y entre todas las cosas que existen en el universo. Todo lo que existe (con vida o sin vida) irradia energía con diferentes frecuencias de vibraciones. Estas vibraciones tienen una influencia sobre su entorno; influencia que puede ser perfectamente medible hoy en día por la ciencia. A veces se menciona para la física bajo los términos de la energía vibratoria de los átomos. Se ha comprobado que las células de todos los seres vivos emiten débiles irradiaciones de luz o Biofotones. Se puede también identificar por las vibraciones producidas por el pensamiento que se pueden percibir en el aura de los seres humanos y en la forma que esta se modifica. La bioenergía es la que se conoce como “chi” para los orientales y como “campo cuánticos” para los científicos occidentales. Las teorías son similares ya que ambas describen un campo de energía formado por pequeñas partículas que componen todo, y se mueven a través de todo.   ¿QUÉ SE HACE CON ESTA ENERGÍA? En mi caso utilizo estas 4 fuentes de bioenergía, muy identificadas en sus efectos, ya que cada una tiene propiedades totalmente diferentes cuando interactúan con los seres vivos. Estas provocan alteraciones de diversas maneras en el organismo. Pueden, cuando se utilizan adecuadamente, provocar cambios a nivel celular y del ADN con los siguientes efectos: desinfectar, desinflamar, limpiar, purificar, anestesiar, estimular, desintegrar, para solo mencionar algunas de estos efectos Algo muy importante de mencionar es que lo que hace el proceso de sanación es estimular la capacidad vital de auto sanación que tienen todo los seres, como de hecho lo hacen los medicamentos de las medicinas alópatas actúan justamente sobre las células Existen 2 leyes de la naturaleza que entran en acción: La ley de auto sanación: Todos los seres vivos tienen esta capacidad innata La ley de la bioenergía (o energía vital): Todos los seres vivos se mantienen en vida gracias a esta energía. Porque todo está hecho de bioenergía y porque esta se mueve a través de todo, es posible que el cerebro humano pueda interactuar con estas partículas de energía con diferentes efectos y capacidades como pueden ser la sanación, percepciones extra-sensoriales, telepatía e inclusive psicokinesis. Lo que hace el sanador con una atención consciente, es utilizar cada una de estas 4 fuente de bioenergía para proyectarlas (o combinación de estas), produciendo beneficios físicos, psicológicos y espirituales al potencializar estas dos leyes de la naturaleza Más información en mi artículo:  “Qué esperar de sus visitas para tratamientos con bioenergía“ Pascal: 044 55 5404 97 17 / 5635 1172

¿Qué es la Bioenergía? La bioenergía se refiere a los campos electro-magnético y electro-plásmico, conocidos como aura, con sus diversos órganos: los chakras, mini-chakras y los nadis (mejor conocidos como meridianos). A estos campos bioenergéticos se les ha llamado de muchas formas:“energía vital”, conocida en la India como “Prana”, en China como “Qi”, en Hebreo como “Ruha “, en Japón como “Ki”; en la mitología egipcia como “Ka”, en la griega como “Icor”, para los aztecas como “Teolt” y, finalmente, en el Antiguo Testamento como el “Aliento de la vida”.   Estos campos no sólo contienen la información de sus cuerpos físico, etérico, astral (o emocional), mental y causal (o espiritual) sino que también son sus moldes. La palabra “molde” hace referencia al hecho de que absolutamente todo nace primero a nivel energético y se materializa después. Un ejemplo simplificado de esto en el contexto humano es que primero tenemos una idea y luego la materializamos a la hora de ejecutarla. Por otro lado, una realidad más compleja es que somos espíritu primero y nos encarnamos después (en este contexto, debemos entender “espíritu” como nuestra parte divina e inmortal). Explicar la función de cada uno de los mencionados “órganos” del “sistema bioenergético humano” rebasa los alcances de este artículo (aunque seguramente platicaré de esto en otro momento), pero algo importante que hay que entender es que todo es energía. Hasta donde ha llegado la ciencia al día de hoy, todo lo que existe en el universo está conformado por átomos en movimiento, o bien “vibraciones energéticas” (término que además describe cómo la percibimos o vemos los sanadores). Los cuerpos energéticos (cada aura) tienen sus propias funciones como cualquier otro órgano físico. Así pues, podemos hablar de la existencia de un sistema más: el bioenergético. Dentro de este sistema, encontramos los siguientes cuerpos:  El cuerpo etérico, que se encarga de la información y alimentación energética de su cuerpo físico y todos sus procesos.  El cuerpo emocional (o astral), que se encarga de la información y alimentación energética de sus emociones.  El cuerpo mental, que se encarga de la información y alimentación energética de los procesos de sus pensamientos. El cuerpo causal, que se encarga de la información y alimentación energética de su espíritu (que también, por cierto, es el encargado de nuestra relación con lo divino). Existen otros cuerpos (11, para ser exactos, mismo número que podemos encontrar de los Chakras principales, que también corresponden a los 11 niveles de la Kabbalah o a las 11 puertas del Árbol de la vida). CONCLUSIÓN: No hace falta recalcar la importancia de nuestro “sistema bio-energético”; este, no solo nos alimenta de nuestra energía vital, sino que también es el responsable de nuestro bienestar físico, emocional, mental y espiritual, por lo que cualquier desequilibrio ocasionará tarde o temprano alguna dolencia. Ver el siguiente artículo: La Bioenergía de sus emociones ¿Estrés, ansiedad, depresión, traumas, fobias, adicciones, penas, pérdida del sentido de la vida…? ¡CONSÚLTENOS! Pascal: 044 55 5404 97 17 / 5635 1172

LA BIOENERGÍA DE SUS EMOCIONES: La formación bioenergética de sus emociones puede tomar varias formas, así como alojarse en diferentes partes del ser humano (desde el cuerpo energético correspondiente hasta su cuerpo físico). Los pensamientos, como parte de la actividad de nuestra mente en continuo movimiento, se manifiestan como “relámpagos de energía de luz” (o vibraciones de cierta frecuencia). De igual manera, las emociones, que por cierto están siempre presentes, se manifiestan como “bolas de energía” que pueden ser pasajeras -̶ es decir, que van y vienen según nuestras emociones del momento ̶ o permanecer, cuando son parte del bagaje emocional de nuestra personalidad (usualmente estas últimas se presentan como “bolas de energía” de mayor tamaño). Cabe mencionar que estos “relámpagos o bolas de energía” tienen color, textura, forma y movimientos (vibraciones) que no sólo pueden ser percibidos por el sanador; hay pacientes que me han llegado a comentar que pueden “ver y tocar” sus emociones… Ubicación de las emociones y de los pensamientos Así como las emociones y los pensamientos tienen forma, tienen también ubicaciones que pueden variar dependiendo de su naturaleza; sin embargo, lo normal desde un punto de vista bioenergético es que se ubiquen dentro del cuerpo que les corresponde (cuerpo astral o causal). Estas energías interactúan entre ellas (pensamientos, ideas y emociones), con nosotros (personalidad, sentimientos, emociones) y con los demás (juicios, conceptos y emociones). Después de formarse a nivel bioenergético dentro de los cuerpos áuricos, se pueden materializar de varias formas, pudiendo tener repercusiones positivas o negativas tanto sobre sus propias condiciones (emociones, pensamientos, sentimientos, etc.) como encarnarse, es decir, alojarse dentro de algún órgano, glándula, tejido o cualquier otra parte de nuestro físico, pudiendo ocasionar entonces dolores y enfermedades. Materialización de las emociones y de los pensamientos Si bien las emociones y los pensamientos nacen fuera de nuestro cuerpo físico, su interacción se vuelve totalmente física cuando se comunican. Esta comunicación se puede dar, por ejemplo, dentro de nuestro cerebro a nivel neuronal (actividad cerebral del pensamiento); a nivel emocional, con las características propias de cada emoción (por ejemplo, el miedo que se refleja en sudoración, alteración de la respiración y cambios químicos y fisiológicos), o ambos, a través de nuestros sentidos y órganos como se puede apreciar en nuestros gestos o cuando hablamos (gritamos, lloramos, nos alegramos, etc.)   Tipos de materialización de las emociones y de los pensamientos Todas estas manifestaciones se hacen totalmente presentes y tangibles (se materializan), ya que el sanador puede ver, tocar y comunicarse e interactuar con estas manifestaciones bioenergéticas. Éstas se pueden presentar en varias condiciones energéticas: Cordones: Hablamos de cordones energéticos cuando existen emociones y/o pensamientos que siguen ligados a algún acontecimiento particular del pasado (a veces inclusive proviniendo de vidas pasadas), pudiendo generar desequilibrios como traumas o fobias. Escudos: Los escudos energéticos suelen ser reacciones energéticas de protección que se crean como respuesta a emociones negativas del pasado; si bien la intención inicial es de protección, suelen ser terriblemente limitantes para el desarrollo del Ser; suelen manifestarse como miedos o agresiones (la necesidad de impedir que me hagan algo que pudiese causarme daño). Imágenes mentales: Éstas son manifestaciones energéticas creadas (a nivel del cuerpo mental) por la misma persona, conforme a sus propias experiencias y aprendizajes, y suelen ser condicionadas por el entorno familiar o social (incluyendo religiones, filosofías, economía, etc.). Dentro de estas imágenes están por ejemplo lo que solemos calificar como prejuicios o auto-desvaloración (imágenes que la mayoría de las veces no son reales sino que corresponden a nuestra propia y limitada visión). Mensajes mentales: También nacen a nivel del cuerpo mental y son creadas de la misma forma que los escudos y por las mismas razones. Sin embargo, no son estáticos como éstos, sino que son proyectados hacia el entorno externo de la persona (solemos explicar este fenómeno como que “no hay química”, ya que la mayoría de las veces se manifiesta a nivel energético y nos resulta difícil expresar o verbalizarlo de forma clara).   CONCLUSIÓN Las emociones y los pensamientos al poder ser identificados bajos sus varias formas, nos permiten (a los sanadores) hacer una lectura de su contenido (diagnóstico). Este diagnóstico tiene la ventaja de no requerir verbalización de parte del paciente. Se puede además ir a la raíz del desequilibrio ya que la información rebasa el nivel de conciencia del paciente. Finalmente, el sanador, al interactuar con esta energía, podrá influir sobre estas para recuperar el balance adecuado a un bienestar físico o emocional. Ver el siguiente artículo: ¿Qué se hace en una Psicoterapia Bioenergética? ¿Estrés, ansiedad, depresión, traumas, fobias, adicciones, penas, pérdida del sentido de la vida…? Pascal: 044 55 5404 97 17 / 5635 1172

¿QUÉ SE HACE EN UNA “PSICOTERAPIA BIOENERGÉTICA”? Lo que cambia radicalmente es el método que utiliza para este fin la “Bioenergía”: la “materialización” de las emociones en lugar del lenguaje. Por lo mismo, la Psicoterapia Bioenergética suele ser muy efectiva, ya que puede abarcar áreas que escapan totalmente a la conciencia del paciente (subconsciente o afuera de lo consciente). El sanador utiliza diversos procesos para interactuar con la bioenergía de los pensamientos, las emociones, los sentimientos y las conductas.   Estos procesos suelen dividirse en cuatros:   Conexiones Este proceso, a veces llamado “escaneo” o “lectura”, permite ubicar la anatomía, la ubicación y el tipo de materialización de las emociones así como el grado de “daños” ocasionados tanto a nivel físico orgánico como a nivel psicológico. Permite también ubicar el origen de las emociones aun cuando éste está escondido en el subconsciente. Un elemento muy relevante es que al comunicarse con los cuerpos bioenergéticos, no se requiere ningún tipo de verbalización de parte del paciente (aunque suele también utilizarse como complemento). Otra gran ventaja es que estos cuerpos bioenergéticos rebasan el nivel de la conciencia del paciente, lo cual permite ubicar orígenes que a veces el paciente desconoce por olvido (bloqueos voluntarios o no) o por estar fuera de su alcance (subconsciente, afuera de lo consciente o de vidas pasadas).      2. Una limpieza bioenergética Debido a la posibilidad de ubicar el grado y volumen del daño, así como su forma y textura, se pueden “limpiar”, “desintegrar” o “limitar” la actividad de las partes energéticas que causan daños (cada una correspondiente a una o varias emociones).      3. Una energización Así como se limpian las energías negativas, se pueden igualmente fortalecer las energías positivas estimulando su actividad energética. Lo que se busca es restablecer la armonía y el equilibrio bioenergético tanto de las partes emocionales y mentales como de las partes físicas que pudiesen estar alteradas.       4. Procesos particulares Existen otros procesos bioenergéticos que se pueden emplear cuando son pertinentes, como regresiones, protecciones, sellados, encapsulados e inclusive apoyos o canalizaciones divinas y espirituales. Estos procesos complementarios tienen diversos usos dependiendo del tipo de manifestaciones bioenergéticas, como podrían ser traumas, fobias, adicciones, penas profundas, depresión, etc. Los 3 procesos de sanación (limpieza, energización y procesos particulares) utilizan diversos tipos de energías o vibraciones sanadoras dependiendo del tipo de materialización en que se manifiesten. Por ejemplo, un escudo se desintegra con cierto tipo de energía, un cordón se corta con otro tipo de vibraciones energéticas, las imágenes y los mensajes se re-direccionan o disuelven, etc. Cuando las emociones son encarnadas en algún órgano, glándula o tejido, se deberá además tratar el órgano conforme a los daños que pudiese tener y conforme a la energía particular de éste. De igual manera, se puede actuar, de ser necesario, sobre el campo bioenergético correspondiente (doble etérico), a través de los chakras correspondientes y/o directamente sobre cada órgano ya que cada uno tiene niveles propios de vibraciones (cada órgano tiene de uno a tres mini-chakras). Conclusiones: El proceso de sanación actúa sobre sus emociones e imágenes mentales derivadas de su forma de pensar y de sus experiencias pasadas; las partes negativas se eliminan de sus campos de energía. La energía puede nuevamente fluir con facilidad a lo largo de sus cuerpos bioenergéticos, chakras y nadis (meridianos). Es así como su cuerpo sana. Su mente también vuelve a un estado más abierto y receptivo, lo que permite a su inteligencia superior entrar y eliminar tranquilamente los obstáculos que le impiden disfrutar de su estado natural de salud y bienestar. El proceso de sanación bioenergética continúa trabajando mucho después de que la sesión de sanación ha terminado, ya que se ha restablecido una conexión entre sus cuerpos sutiles y físicos, y la transferencia de información fluye de nuevo a través de su sistema, desde el nivel celular y molecular (cuántico sub-atómico) hasta el nivel espiritual. El proceso natural de auto-sanación entra en acción y su crecimiento personal se acelera. Su Ser vuelve a desarrollarse hacia su plenitud.  ¿Estrés, ansiedad, depresión, traumas, fobias, adicciones, penas, pérdida del sentido de la vida…? Pascal: 044 55 5404 97 17 / 5635 1172